Ecologistas alertan sobre el vertido de coches tras la dana en Muro y llevan el caso a la justicia
La polémica por la acumulación de vehículos en Muro ha escalado hasta los tribunales, tras la denuncia presentada por la Colla Ecologista La Carrasca-Ecologistes en Acción. Esta organización ha alertado sobre el impacto ambiental que podría derivarse de la concentración de cientos de coches retirados tras una dana, que actualmente se encuentran amontonados en una zona no urbanizable, a escasos 20 metros del río de Agres, dentro de una área de protección del dominio público hidráulico. La empresa encargada de la retirada de los vehículos ha manifestado su intención de proceder de manera gradual, lo que podría extenderse durante varios meses, según advierten los ecologistas.
Impacto ambiental y riesgo de contaminación
En su denuncia, el grupo ecologista destaca que el lugar donde se han acumulado aproximadamente 800 coches está en una ubicación crítica, colindante con dos espacios naturales protegidos: el Paisaje Protegido del Serpis y el Paraje Natural Municipal Font del Baladre-Fontanars-Riu d’Agres. La Ley de Aguas prohíbe cualquier actividad que pueda provocar contaminación o degradación del dominio público hidráulico, incluyendo la acumulación de residuos sólidos y sustancias que puedan representar un peligro para el entorno.
Los ecologistas han señalado que la permanencia de estos vehículos representa una amenaza ambiental significativa, especialmente en caso de lluvias intensas, ya que podría provocar la contaminación del suelo y el arrastre de contaminantes hacia el río de Agres. Además, han alertado sobre el riesgo de incendios, que podría tener consecuencias sanitarias para la población cercana, situada a menos de 200 metros del lugar.
Medidas cautelares solicitadas
En la denuncia presentada ante el juzgado de guardia, se argumenta que los hechos denunciados podrían constituir un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente, tal como se tipifica en el artículo 326 del Código Penal. En este contexto, se solicita que se adopten medidas cautelares urgentes, incluyendo la retirada inmediata de los vehículos a un depósito que cumpla con los requisitos de urbanismo, como la disposición de pavimento impermeable y un sistema seguro para la recogida de derrames.
Los ecologistas han enfatizado la necesidad de actuar con rapidez para evitar que el riesgo de incendio y la contaminación del suelo y de las aguas, tanto subterráneas como superficiales, se materialicen, lo que podría acarrear graves perjuicios ambientales.
Repercusiones legales y ambientales
La situación actual ha generado un amplio debate sobre la responsabilidad de las autoridades y las empresas en la gestión de residuos y la protección del medio ambiente. La acumulación de vehículos en una zona tan sensible desde el punto de vista ecológico plantea interrogantes sobre la eficacia de las regulaciones existentes y la capacidad de respuesta ante situaciones de emergencia ambiental.
La denuncia de La Carrasca-Ecologistes en Acción pone de manifiesto la necesidad de una mayor vigilancia y control en la gestión de residuos, así como la importancia de la colaboración entre las instituciones y las organizaciones ecologistas para garantizar la protección del entorno natural y la salud pública.